Necesitamos para nuestra sesión de peluquería un cubo con agua, un cepillo de pelo, un peine pequeño y gomas para trenzar y un taburete bajo. Será mucho más cómodo hacer las trenzas subidos en el taburete,sobre todo si se trata de un caballo con alzada y una crin abundante.
Para la trenza sencilla, separamos tres mechones uniformes del mismo grosor justo detrás de la nuca del caballo. Para facilitar la separación se rapan a veces unos pocos centímetros de la crin a cero, justo por donde pasa el cuero de la cabezada en la nuca del caballo.
Una vez divididos los mechones, se trata de ir haciendo trenzas bien apretadas, y al llegar al final, fijamos el extremo de la trenza con una goma doblada varias veces sobre si misma.
La calidad, cantidad y conformación del cuello, son factores determinantes a tener en cuenta al preparar las crines.
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